spot_img
14.5 C
Morelia
domingo, mayo 4, 2025

UN MAL PARA LA UNIVERSIDAD

Cuando más siniestros son los deseos de un político, más pomposa, en general, se vuelve la nobleza de su lenguaje

Alfous Huxley (1894-1963). Novelista inglés.

 

jaimelopezEn cualquier otro momento, sin duda hubiera sido una noticia positiva que el gobierno federal haya autorizado una partida presupuestal extraordinaria a la Universidad Michoacana, que le sirva de oxígeno puro a las alicaídas finanzas nicolaitas y pueda la institución cubrir sus compromisos de fin de año. Hoy, no estoy tan seguro que se trate de una buena noticia.

Me explico:

La Universidad anuncia, sin especificar el monto, que ha obtenido de la Secretaría de Hacienda casi todo el recurso que necesita para cerrar el año. Bien, por tanto profesor y empleado que ya ha devengado su salario y no lo ha podido cobrar. Empero, la duda respecto de lo positivo de la medida surge porque es altamente probable que la comunidad universitaria vuelva a cancelar indefinidamente todo intento de reformarse íntegramente, sobre todo en su régimen de jubilaciones y pensiones, a fin de no volver a caer en la insolvencia financiera como ha ocurrido en los últimos años, por el hecho de que ni profesores ni empleados aportan un peso partido por la mitad para el fondo de jubilaciones.

En cuanto han conocido la noticia de que ya hay recursos extraordinarios para sacar adelante el año, los sindicatos nicolaitas comienzan a frotarse las manos y a reforzar su discurso de que no hay ninguna necesidad de reformar nada al interior de la institución, porque todo es cosa de “apretar” un poco a los gobiernos federal y estatal, con marchas, bloqueos y paros laborales, y ambos terminarán cediendo y entregando los recursos financieros suficientes. ¿Para qué cambiar nada, si siempre el gobierno saldrá al quite?

Y, para ser francos, los mafiosos sindicatos universitarios y los capos que los comandan, tienen razón: siempre ha habido un gobierno que saque del atolladero a la Universidad, con todo y lo absurdo e injusto que es su régimen de jubilaciones. Si este año ni el gobierno estatal ni el federal, hubieran ido al rescate de la Universidad, ésta se hubiera visto, ahora sí, obligada a realizar los cambios legales imprescindibles para salir del barranco financiero y comenzar a revertir su histórica crisis por sí misma, no a través de la dádiva gubernamental.

Por eso es que no estoy seguro que haya que festinar ese apoyo extraordinario del gobierno federal, porque en el fondo, visto con toda frialdad y objetividad, es un daño que se le hace a la Universidad. Duele y sé que no es lo políticamente correcto, pero estoy convencido que así es.

Por lo pronto, ya podemos ir olvidando cualquier intento de reforma universitaria. Total, como ¿para qué? Vuelve la comunidad nicolaita a su vegetativo estado de confort. Si no, al tiempo.

jaimelopezmartinez@hotmail.com twitter@jaimelopezmtz 

N. de R. Este reportero sale de vacaciones y espera volver a este espacio el primer martes de enero. Saludos.

Noticias Recientes
spot_img
Noticias Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí