La democracia es una broma griega
Carlos l de Inglaterra (1600-1649) Rey de Inglaterra
Rodrigo Vallejo ha sido detenido otra vez, pero ahora pudiera enfrentar un panorama más hostil. El hijo menor del ex gobernador Fausto Vallejo se encuentra recluido en un penal federal en Guanajuato; la Fiscalía General de la República le hace cargos más severos que en las ocasiones anteriores.
Podría sonar a perogrullada exigir que un proceso penal se encauce sólo por la vía legal, pero es México y aquí, ya se sabe, todo es posible, todo puede pasar, desde mantener a alguien inocente en la cárcel sólo porque así convenga al poder público en turno, hasta liberar a un culpable por la misma razón.
Por ende, es exigible que el proceso de Vallejo Mora sea apegado a derecho y desligado de intereses político. Para bien o para mal, el PRI no está ya en el poder y eso podría jugar a favor o en contra del hijo del ex mandatario. No debiera, pero es altamente probable que así suceda, aunque habrá que ver en qué sentido.
Es probable, sólo probable, que el tricolor haya llevado a la cárcel a Rodrigo en 2014 y 2015, por el rompimiento de su padre con el entonces poderosísimo Alfredo Castillo, y como una venganza de éste; pero también es probable, sólo probable, que el mismo PRI le haya devuelto la libertad, justo por los nexos políticos de su padre sobre todo con Manlio Fabio Beltrones.
Si es que hubo esa dualidad priísta en su momento, que es mera posibilidad, hoy no la hay más, simplemente por no hay ya PRI que valga, ya no hay PRI que intervenga ni en apoyo ni en contra de Rodrigo. Es exigible que Morena, ahora en el poder, ni apriete a los Vallejo por razones políticas, ni acuda en su auxilio por lo mismo. De hecho, la teoría indicaría que Morena no debiera tener siquiera injerencia en el proceso, y que éste se encauce sólo por la vía jurídica, jamás con cariz político. Veremos cómo se maneja en ese terreno el naciente gobierno lopez obradorista.