Los científicos se esfuerzan por hacer posible lo imposible. Los políticos, por hacer lo posible, imposible
Bertrand Rusell (1872-1970) Filósofo británico
Dicen los allegados a Margarita Zavala, y se entiende que es lo políticamente correcto, más en tratándose de una dama, que su decisión de separarse de la contienda electoral por la Presidencia de la República, representa un acto de gran valor y coraje. Ella, a su vez, argumenta que da un paso de costado por congruencia y honestidad.
Yo, francamente, no veo ni el coraje y el valor, ni menos la congruencia y la honestidad en ninguna parte. Yo más bien percibo un acto de irresponsabilidad.
¿Dónde está el valor y el coraje al renunciar a la mitad de una carrera, más si es sin motivo sólido aparente?, ¿dónde la congruencia y la honestidad al meter en un problemón de logística al INE y, sobre todo, al decepcionar y dejar sin candidata a los muchos o pocos que se ilusionaban con ella en la Presidencia, o al menos en la boleta electoral?
Zavala está evidenciando una falta de carácter que le impide seguir en la lucha, por más que ésta se vea complicada, lo que en todo caso le volvería inhábil para ejercer el poder máximo: alguien que se arredra a las primeras de cambio porque las cosas no salen como se esperaba, no tiene los tamaños para dirigir un país.
Irresponsable también es con el INE, porque las boletas para el primer domingo de julio ya están en impresión, incluso las que ocuparán las embajadas ya han sido enviadas, lo que impide volver a imprimirlas de nueva cuenta, ya sin el nombre de Zavala. Y el día de la votación, seguro habrá miles de ciudadanos confundidos porque verán su nombre y su foto, pero acaso no tendrán claro si está o no participando.
¿O es que ella supuso que la elección sería cosa de coser y cantar? Si fue así, qué mala lectura de la realidad, por más que antes de conocer candidatos figurara ciertamente en una posición envidiable en las encuestas. Sabía a lo que se enfrentaba, sabía del fenómeno López Obrador, sabía que el dinero que le daría el INE sería una bicoca, sabía el hándicap que daba al ir sin una estructura de partido detrás suyo, y sabiendo todo eso, jugó.
Por eso, no se vale ahora arriar banderas pretextando cualquiera de esos factores, porque, insisto, ya los conocía
Y otro punto fundamental a considerar, acaso el más relevante: ella, como Jame Rodríguez, “El Bronco”, juegan con la camiseta de los independientes, y su renuncia puede dar pie a los señalamientos en contra de esa figura, a minimizar el concepto. ¿Para eso quieren los apartidistas jugar como candidatos, para renunciar a las primeras de cambio?, será la pregunta con alta dosis de insidia, aunque con una pizca de argumentación que Zavala propicia con su actitud. Para quienes hemos sido siempre partidarios de la figura de los independientes, es deseable que no cale el desencanto.
Por todo eso, no creo que su decisión pueda calificarse de otra forma que una verdadera irresponsabilidad.
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