Todos los gobiernos mueren por la exageración de su principio
Aristóteles (384-322 AC) Filósofo griego
La manta desplegada por los eufóricos senadores morenistas, luego de aprobar la abrogación de la reforma educativa peñista y aprobar un bodrio que destina a la ignorancia a esta y las siguientes generaciones de mexicanos, sintetiza y concentra el quid del asunto: “en la 4T los senadores de Morena estamos con los maestros de México…¡compromiso cumplido!”
En realidad, es una verdad a medias: los senadores de Morena están más que con los maestros, con su sindicato, con sus líderes corruptos. Están con el sindicato para acentuar su irresponsabilidad, para garantizarle a sus miembros cada vez mejor paga por menos horas de labor, para asegurarle el cumplimiento de decenas de bonos y prebendas ofensivas, para que siga convertido en la lacra del país.
Si los senadores estuvieran con los maestros, habrían perfeccionado la reforma peñista, mejorado la evaluación obligatoria, cerrados los centros de formación guerrillera llamados Escuelas Normales, garantizado ascensos y plazas sólo a los mejores. Pero como en realidad están con Elba Esther Gordillo y el crimen organizado disfrazado de Cnte, los senadores de Morena y los no menos sinvergüenzas de PRI, PRD y Movimiento Ciudadano, aprobaron un esperpento de reforma que, por el contrario, garantiza la continuidad indefinida de la caída libre de la educación en este país.
Aprobaron la eliminación de los ejercicios de evaluación como requisito de entrega de plazas y de ascensos, lo que equivale a que sea el marchómetro la clave para ello, y a que vuelvan las plazas automáticas para normalistas.
Fue una reforma para complacer a la Cnte y al Snte, y la mejor prueba es que al margen de la cantaleta oficial en el sentido de que el estado será el rector de la educación, las hordas magisteriales permitieron que diputados y senadores sesionaran con toda tranquilidad, sabedoras de que ni éstos ni el presidente López tendrían los pantalones para retarles. Si los legisladores tuvieron permiso de la Cnte para sesionar, es porque lo aprobado fue a contentilo de ésta.
Entendible la postura retrógrada de Morena, pero aún más vergonzosa la de priístas y perredistas, que hace seis años habían aprobado una reforma que ahora debió profundizarse, y que hoy tragan sapos y culebras con tal de no contrariar al rey López y a la mafia sindical.
La jornada de este jueves es, sin duda, un auténtico réquiem por México entero. Una vergüenza de país.
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