Quiero ser el hermano del hombre blanco, no su hermano político
Martín Lither King (1929-1968) Pastor Bautista
A la luz de las dimensiones que está tomando la cuarta ola de la pandemia, es absolutamente imprescindible que el gobierno tome con toda seriedad la aplicación a rajatabla de las medidas sanitarias que se han dispuesto, pero que como regularmente sucede, solo tienen validez en el papel.
Una de ellas, fundamental, es la aplicación de sanciones drásticas para quienes no porten cubre bocas en espacios públicos. Según el nuevo decreto emitido hace apenas un par de semanas por el gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla, aquellas personas que no lleven cubre bocas en espacios públicos, serán detenidos y remitidos a barandilla, de la cual no saldrán en automático aún pagando la sanción económica correspondiente.
La medida es completamente justificada. El problema es que ya desde el gobierno de Silvano Aureoles, en las primeras etapas de la pandemia, se había publicado un decreto similar y jamás se llevó a la práctica. El gobierno sólo la difundió con un carácter «educativo», a manera de buscar incidir en la conciencia de los michoacanos, incluso muy a tono con la absurda política lópez obradorista de no obligar a nadie nada.
Contrario a los gobiernos del mundo desarrollado, en México sólo hemos sido capaces de diseñar y aprobar leyes drásticas, pero jamás se han aplicado. El gobierno ha decidido auto cercenarse en sus atribuciones, con tal de no verse como represor. Pero a final de cuentas, las al menos quinientas mil muertes por Covid en mucho deben explicarse por esa falta de pantalones del gobierno en todos sus niveles, sobre todo el federal.
Y en Michoacán no hay siquiera una sombra de excepción. Hoy, por eso es impostergable que, ahora sí, se apliquen a pie juntillas todas las medidas de apremio para tratar de contener lo más rápido posible la propagación del virus. El decreto firmado por Ramírez Bedolla debe ser llevado a la práctica sin dilación ni pretexto alguno, incluyendo la sanción de cárcel para los irresponsables que se resistan a usar cubrebocas en cualquier lugar público. Y de ahí para abajo.
Veremos qué tan serio es el gobierno bedollista. Por el bien de los michoacanos, más vale que lo sea…y mucho. Twitter @jaimelopezmtz