El precio de desentenderse de la política, es ser gobernados por los peores hombres
Platón (427 a. C. – 347 a. C.) Filósofo griego
Por supuesto que le asiste la razón a la bancada legislativa de Morena, cuando advierte que debe investigarse a fondo en dónde quedaron los cuatro mil millones de pesos que contrató, como deuda de largo plazo, el gobernador Silvano Aureoles, poco antes de concluir su gestión.
Y sí, nunca quedó claro el destino de ese dinero, tanto, que el propio Sistema Estatal Anticorrupción solicitó en 2020 información al respecto, misma que le fue negada por completo.
Afirman los morenistas que el endeudamiento del gobierno debe atribuirse a Aureoles por ese crédito. Esa es una verdad muy a medias, más cerca incluso de una mentira.
Dos cosas son ciertas: no hay claridad respecto del destino de esos cuatro mil millones de pesos y, en parte, ese monto contribuye a la deuda total del estado, 19,500 millones de pesos. Empero, quienes menos autoridad moral tienen para señalar con dedo flamígero, son los cuatroteístas, dado que los más importantes culpables de la tragedia financiera del estado, son dos de sus encumbradas figuras, Lázaro Cárdenas Batel y Leonel Godoy Rangel.
No es que eventualmente Auroles no tenga responsabilidad, pero si nos vamos a los números, podemos ubicar nivel de autoría: números gruesos, el gobierno debe a los bancos, a largo plazo, 19,500 millones de pesos.
De ellos, Cárdenas contrató 7 mil, Godoy otro tanto y Aureoles 4 mil. Mil quinientos más se distribuyen entre el resto de administraciones a partir de Cárdenas, el cual recibió la administración, importante no perderlo de vista, con créditos pendientes de pago por solo 155 millones.
Es decir, entre él y Godoy son responsables de 14 de los 19,500 millones. Si lo queremos ver porcentualmente, diríamos que Cárdenas tiene un 35 por ciento de responsabilidad, Godoy otro tanto y Aureoles un 20, números redondos.
Por eso, es tramposa la postura de la bancada morenista en el Congreso del Estado, que ayer avaló al gobierno reestructurar o contratar deuda nueva por el mismo monto que debe actualmente, a fin de pagar todos sus compromisos con la banca y encarar sus nuevos créditos pero en mejores condiciones financeras.
Es doloso, pues, que los morenistas solo apunten a Aureoles, cuando entre los suyos tienen a los más importantes autores de la masacre financiera del estado.
Si los cuatroteístas señalaran también a Cárdenas y a Godoy, entonces sí tendrían calidad moral para hacerlo con Aureoles. Cada uno de esos gobernadores tiene su respectiva dosis de responsabilidad en el endeudamiento. Si queremos ser serios, dimensionemos a cada quien y, ahí sí, que paguen todos los que tengan que pagar.
twitter@jaimelopezmtz
