Nadie puede sospechar cuántas idioteces políticas se han evitado gracias a la falta de dinero
Charles Maurice Talleyrand (1754-1838) Clérigo y político francés
El gobernador Silvano Aureoles anunció este lunes que enviará en las siguientes horas una iniciativa al Congreso del Estado para que sea obligatorio en Michoacán el uso del cubre bocas, y para que eso suceda, que sea usado sí o sí en la vía púbica, la disposición irá acompañado de las sanciones correspondientes para quienes no la cumplan.
La medida seguramente generará polémica y rechazo en no pocos sectores, pero es claro que se trata de una acción absolutamente necesaria, si lo que buscamos es reducir los alarmantes índices de propagación del covid en la entidad, particularmente en esta capital.
Ya en abril, el mandatario había expedido un decreto que igualmente contemplaba la obligatoriedad del uso del cubre bocas, pero la verdad es que nadie, ni el mismo gobierno, tomó con seriedad la disposición. A fin de cuentas, el que lo usa es por un sentido de responsabilidad o bien porque para ingresar a determinados sitios es indispensable, pero no porque la medida del gobierno hubiera sido considerada con seriedad por la población, justo porque nunca hubo, por parte del gobierno, la voluntad y la decisión de sancionar a los infractores.
Todo apunta a que en esta ocasión sí va en serio. Quizá tarde, pero al fin el gobierno silvanista ha caído en la cuenta de que si sigue apelando a la responsabilidad y la madurez de la población, tal como hace el gobierno federal, la pandemia irá en permanente ascenso. Está claro que a los mexicanos eso de anteponer la responsabilidad, la madurez y la consciencia, no se nos da, y peor aún, cuando hay un presidente que actúa justo al contrario de esas cualidades, y que además se vanagloria de ello.
Luego entonces, no queda sino volver obligatorio el uso del cubre bocas, y en esta ocasión no será un simple decreto el que firme en ese sentido Aureoles, sino una iniciativa para que la medida quede incorporada en la ley y, como toda buena ley, que incluya las sanciones a los infractores.
Bien por la medida. Ahora debe exigirse su cumplimiento por la sociedad sí, pero por el gobierno también. Que no vuelva a quedar en retórica y en anuncios que ganan las ocho columnas, pero que no se materializan. Aureoles debe demostrar esta vez firmeza y sancionar a los aún miles y miles de personas que se niegan criminalmente al uso de la más firme medida de prevención del virus, el cubre bocas. Veremos qué tan seria es ahora la decisión del gobernador. twitter@jaimelopezmtz jaimelopezmartinez@hotmail.com