Leyes hay, lo que falta es justicia:
Ernesto Mallo (1948-?) Escritor argentino
La idea de Roberto Monroy es más que plausible, lamentablemente inviable en términos de realismo: que alguna selección de fútbol de las que estarán en México durante la Copa del Mundo del próximo año, “adopte” como sede a Morelia para su hospedaje y entrenamientos. Ello, por la ventaja comparativa que significa la cercanía de nuestra capital con la del país y con Guadalajara, amén de la conectividad aérea y terrestre.
Y sí, suena más que atractiva la idea. En otras circunstancias, sería absolutamente viable que más de alguna Selección futbolera se sintiera atraída por hospedarse en Morelia. Ni hablar de los atractivos de la ciudad, además de las ventajas ya descritas.
Pero…el maldito pero: la imagen de la ciudad, mejor dicho, del estado, no ayuda. Todo lo contrario. Es el obstáculo para que esa posibilidad se diluya, de hecho se cancele a priori. Habrá que decir que el fenómeno no es privativo de Morelia y de Michoacán, es nacional. En el mundo entero hablar de México es hablar de narcos, de violencia e inseguridad.
Por eso, la FIFA dispuso que solo las tres ciudades más grandes sean sedes del evento mundialista, y no es porque en ellas no haya esos flagelos de la criminalidad, sino porque obviamente es menos complicado garantizar seguridad en esas tres urbes que en el interior del país.
Y no parece tener sentido que la federación de fútbol de cualquier país vaya a arriesgar a sus atletas en ambientes peligrosos, pudiendo evitarlo.
Otra idea más de Monroy que sin duda se quedará en el escritorio. Lo dije hace poco: el secretario de Turismo de Michoacán es probablemente de los servidores públicos más creativos, de los que mejores cuentas entregan tomando en cuenta las escasas herramientas de que dispone y, sobre todo, el contexto y las circunstancias en que promociona el turismo, absolutamente adversas. Las cosas, como son.
X@jaimelopezmtz
