El mayor mal es el gobierno ilimitado:
Friedrich Hayek (1899-1992) Economista austríaco
Dice Octavio Ocampo que su partido, el PRD, irá solo en las elecciones para gobernador en el 27, y anticipa incluso en nombre de su candidato, candidata en este caso: Araceli Saucedo.
Por donde se le vea, es una decisión absolutamente estéril, intrascendente: el PRD, lo que queda del PRD, ni le aporta nada a nadie en una alianza, ni le representa un peligro tampoco a nadie. A eso ha quedado reducido como partido.
La prueba es que en su calidad de partido pueblerino, no tiene más figura con la que competir que con una senadora que llegó a la posición con los votos opositores, del PAN sobre todo, y lo primero que hizo en cuanto arribó a la llamada Cámara Alta fue traicionar a sus partidos impulsores y, medularmente a quienes votaron, votamos, por ella, para pasarse al lado comodino, pero jugoso política y económicamente, de la 4T.
Un partido reducido a su mínima expresión con una candidata en la que no confiaría hoy nadie -el que traiciona una vez traicionará siempre-, ¿a qué puede aspirar? Visto así, a nada. Empero, la jugada perredista será obviamente la negociación con Morena: “postular” su candidata, sumarse a Morena aunque le toque formarse en la fila de las migajas atrás del Verde y del PT, y desde ahí ceder en su candidatura gobernamental a cambio de una de diputado federal o local para el propio Ocampo o para que quien él decida, convertido como está en el emperador perredista.
Es tan burda la maniobra que causa hilaridad antes que interés o preocupación en nadie, ni en el oficialismo ni en la oposición, aunque bien pudiera llevar la dirigencia perredista su as bajo la manga en caso de que Morena desprecie su adhesión: jugar con candidata propia en el 27, no importa quedar en el último lugar de las votaciones, pero agenciarse una buena cantidad de millones de pesos, vía las prerrogativas a que tiene acceso.
A eso ha quedado reducido el otrora partido grande de la izquierda: a mendigar un espacio como rémora de Morena, o a mantenerse con oxígeno artificial para agenciarse una buena cantidad de dinero en las elecciones, para que sus dirigentes se aseguren el futuro personal, porque, ojo, es altamente probable que pierda el registro estatal y por ende desparezca del mapa electoral del estado. Si no, al tiempo.
X@jaimelopezmtz
