La impunidad premia el delito, indice a su repetición y le hace propaganda; estimula al delincuente y contagia su ejemplo:
Eduardo Galeano (1940-2015) Periodista uruguayo
La aseveración del secretario de Marina, Raymundo Pedro Morales, tiene mucho más de fondo del que parece en una lectura superficial. Dijo este martes como orador oficial del acto cívico del 16 de septiembre:
“Fue muy duro aceptarlo, pero hubiera sido mucho más y absolutamente imperdonable callarlo. Así, el mal tuvo un fin determinante, en la Marina no encontró lugar ni abrigo. Fuimos nosotros mismos quienes dimos el golpe de timón, porque la lucha contra la corrupción y la impunidad son parte central de la transformación”.
Se refería obviamente al escándalo del huachicol fiscal que envuelve a la Marina y no pocos políticos, empresarios y junior ligados a la 4T. En una estrategia evidente de contención de daños para la Marina, su titular cambió la versión oficial de las investigaciones y detenciones por el delicado caso: el gobierno primero había atribuido la autoría al poderoso Omar García Harfuch, pero dado el nivel de afectación que ha sufrido el organismo militar, ahora se le retira al secretario de Seguridad el mérito para endosárselo a la Marina. De ahí la afirmación del secretario: “fuimos nosotros quienes dimos el golpe de timón”.
Habrá que reconocer que se trata de un buen intento como estrategia de contención de daños en favor de la Marina, pero parece insuficiente en función de la gravedad de los señalamientos que pesan sobre varios de sus mandos, incluido el ex secretario, José Rafael Ojeda y los hijos de Andrés Manuel López Obrador.
Mucho, mucho más que eso tendrá que hacer la Marina para recuperar en algo el crédito social perdido por el escándalo del huachicol fiscal. Y no tender un manto de impunidad sobre Ojeda, sería una buena medida en ese sentido. Veremos. X@jaimelopezmtz
