Cuando la gente no aprende a manejar las herramientas del juicio y meramente sigue sus esperanzas, están sembradas las semillas de la manipulación política
Stephen Jay Gould (1941-2002) Científico norteamericano
Es claro que el presidente del Congreso del Estado, José Antonio Salas Valencia, cometió un error político al negarse a acatar la resolución del juez Primero de Distrito, Ubaldo García Armas, referente a que la 74 Legislatura repusiera el procedimiento para decidir si se instaura o no juicio político al Auditor Superior de Michoacán, José Luis López Salgado.
En lugar de aceptar la instrucción judicial, Salas decidió revirar con un recurso de revisión, mismo que está en trámite.
Salas explica que no es desacato, sino un paso normal que la ley permite en este caso al Congreso; cierto, es un derecho tramitar ese recurso de revisión para quien recibe una instrucción de ese tipo por un juez federal, pero hacer uso de esa facultad desnuda que los diputados, o al menos el presidente Salas, estaría tomando partido por no llevar a juicio político al Auditor, es decir, por darle impunidad, la misma que le brindó la anterior Legislatura.
Salas tenía la opción de acatar la resolución o negarse y tramitar la revisión; se decidió por la segunda y me parece que es una pésima señal política.
A final de cuenta, la solicitud de juicio político a López Salgado se tramitó por parte de Cemide ante la anterior Legislatura, que la echó abajo votando en contra. La actual Legislatura apenas va tomando posesión y no perdía nada acatando la orden del juez; todo lo contrario, hubiera sido una excelente oportunidad para enviar un mensaje de que, contrario a sus antecesores, los actuales diputados no van por la impunidad al Auditor.
No sé si la decisión de Salas fue personal, como presidente del Congreso, o fue producto de una disposición colectiva de la Junta de Coordinación Política. Supongo que fue personal, pero como haya sido, qué error craso cometió esta Legislatura, porque el mensaje que genera es que, también, le tiene tal temor al Auditor que es capaz de pelear con un juez federal con tal de asegurarle a aquel un manto de impunidad.
Vaya oportunidad dejó ir Salas, porque evidentemente va a perder el recurso de revisión y terminará teniendo que acatar la orden de reponer la votación del juicio político a López Salgado, pero es diferente hacerlo motu proprio, por convencimiento, que obligado por un juez.
¿Pues qué tanta información sobre los diputados tiene el Auditor, que éstos le tienen pavor? jaimelopezmartinez@hotmail.com twitter@jaimelopezmtz>
