spot_img
18.5 C
Morelia
domingo, julio 6, 2025

¿PODRÁ BEDOLLA CON EL CÁRTEL CENTISTA?

Los científicos se esfuerzan por hacer posible lo imposible; los políticos por hacer imposible lo posible

Bertrand Russell (1872-1970) Filósofo inglés

 

jaimelopezEs sano que el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla detalle el número de bonos que reciben los trabajadores de la educación con plaza estatal, en un ejercicio de transparencia que por fin dilucida no solo ese volumen, sino desnuda la inmoralidad de dicha «conquista» sindical.

Este lunes, acompañado de su secretaria de Educación, Yarabí Ávila, el Ejecutivo precisó los veintidós diferentes tipos de bonos, aunque justifica que otros gobiernos los hayan autorizado, bajo el argumento de que los maestros de plaza estatal tenían un ingreso inferior a los federales en un promedio de hasta 40 por ciento, y los bonos fueron un mecanismo para resarcir esa disparidad salarial.

En realidad, no debe perderse de vista que, para no variar, fueron los gobiernos de los hoy encumbrados cuatroteístas Lázaro Cárdenas Batel y Leonel Godoy, los autores del desastre educativo-sindical-presupuestal, dado que fueron ellos quienes abrieron las arcas gubernamentales al cártel centista. Eso explica porqué hoy Bedolla justifique la autorización de ¡22 bonos!

Se aplaude la apertura bedollista en el tema, pero al mismo tiempo ello le obliga a dar un manotazo en la mesa y, aunque no le guste, emular a su odiado antecesor, Silvano Aureoles, el primer gobernador desde Batel en no aprobar un solo bono más al magisterio, lo que explica el odio sindical hacia él. Pero si Ramírez Bedolla no quiere pasar a la historia negra de los gobernadores, en la que figuran con mención honorífica los señalados Batel y Godoy, debe, como Aureoles, bajar la cortina a la mafia del CNTE.

En términos financieros será el gran reto de Bedolla: cómo cerrarle la puerta a los aliados de Morena pero al mismo tiempo los depredadores del presupuesto, los centistas. El gobernador debe dejar en claro que su nueva encomienda trasciende cualquier compromiso de tipo político, electoral o ideológico incluso.

Solo un escalón abajo del reto de contener la criminalidad y al de encauzar razonablemente bien el manejo de la pandemia (para lo cual, en ambos casos deberá ir a contra corriente de la política presidencial), poner un dique a la voracidad depredadora de la CNTE será la prueba máxima al gobernador. Veintidós bonos ya son un número inmoral. Lo menos que puede hacer Bedolla es evitar que aumenten. ¿Tendrá los arrestos para imponerse al cártel centista? Veremos.

twitter@jaimelopezmtz

Noticias Recientes
spot_img
Noticias Relacionadas