spot_img
25.4 C
Morelia
sábado, julio 26, 2025

PORFIRIO, DESATADO

Cuanto menos aporta un político, más ama su bandera

Kin Hubbard (1868-1930) Historietista norteamericano

 

jaimelopezPorfirio Muñoz Ledo anda de caza. Está desatado y se ha vuelto un auténtico peligro para el presidente y su 4T: hace un par de semanas advirtió que López Obrador y su gobierno tienen un pacto con el crimen organizado, pero que ese pacto no puede heredarse al próximo mandatario. Ahora, este lunes, emplaza al INE y a la Unidad de Inteligencia Financiera para que paren las narco elecciones, dado que todos los procesos comiciales en el país parecen decantarse ya por la injerencia criminal.

Seguro este martes el presidente López Obrador, igual que hace dos semanas, recurrirá a la descalificación a Muñoz Ledo, no a rebatirle con hechos y argumentos, sino sólo a referirse a su edad, como «explicación» de sus dichos, es decir, a hacer sentir que Porfirio «chochea» y, por tanto, no hay que creerle.

El problema para el presidente es que lo diga o no Muñoz Ledo, los resultados de las elecciones del año anterior y de este, sin duda han tenido como principales protagonistas a los programas sociales y al crimen organizado, ambos jugando, obvio, para el gobierno.

Qué Muñoz Ledo esté enviando semejantes obuses es, sin duda, porque se encuentra resentido con el presidente porque no lo apoyó para mantenerse en la Cámara de Diputados. Eso es indiscutible, pero tampoco quiere decir que no sea fundado lo que habla sobre el crimen y su relación con el gobierno y su injerencia en las elecciones. Desde luego que no miente.

La imagen de un narco gobierno y las narco elecciones en la 4T, comienza a cimentarse entre la opinión pública. En la 4T y fuera de ella se reconoce esa realidad, pero también habrá que decir que no parece mermar en los resultados electorales. La indiferencia y la apatía del mexicano le llevan a ser consciente de esa circunstancia, pero al mismo tiempo seguir votando en favor de quien la propicia. Somos una sociedad de cínicos.

Pero con todo y eso, bien hace Muñoz Ledo en no quitar el dedo del renglón, porque más allá de que su nueva pose crítica sea producto de un berrinche personal y político, sus señalamientos no tienen un ápice de mentira, y deben ponerse en la palestra por la salud del país. Un país que va directo al precipicio. Voces como la de Porfirio obligan al menos a no enviar la realidad debajo de la alfombra.

twitter@jaimelopezmtz

Noticias Recientes
spot_img
Noticias Relacionadas