La política necesita a gente que no necesite a la política
Paul Carvel (1964-?) Periodista belga
La Escuela Normal de Arteaga recibió esta semana la Presea al Mérito Docente por parte del Congreso del Estado.
Van dos o tres “méritos” de la institución, que justifican el reconocimiento, por si alguien los ignoraba:
Uno.- históricamente ha sido forjadora, lo mismo que su par de Tiripetío, de terroristas y desestabilizadores.
Dos.- especialidades de la escuela son el conocimiento a nivel de doctorado de secuestro de autobuses y conductores, el asalto a camiones distribuidores de mercancía diversa, lo mismo que de vehículos oficiales y, claro, el bloqueo de carreteras y asalto de casetas de cobro de la autopista Siglo 21.
Tres.- como en Tiripetío, en Arteaga no hay autoridad gubernamental que la rija. Hay un autogobierno de estudiantes, que definen malla curricular, criterios de evaluación, perfil de maestros y directivos, calendarios, etcétera. Los directivos son figuras decorativas, lo mismo que los maestros. Obvio, ninguno de éstos tiene la osadía de reprobar a algún alumno.
Cuatro.- en la zona y en todos los niveles gubernamentales, policiacos y de inteligencia militar, es sabida la fuerte vinculación de la escuela con el crimen organizado, primero La Familia Michoacana y luego su derivación, Los Caballeros Templarios.
Cinco.- tan es así, que Servando Gómez, alias “La Tuta”, cabeza de esos grupos delincuenciales, es egresado de la escuela y estuvo en la nómina de la Secretaría de Educación en el Estado como “maestro” durante muchos años. Claro, todos los titulares de la SEE pasaron por alto esa minucia.
Seis.- en el gobierno de Felipe Calderón, el entonces secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, tuvo la absurda idea de hacer pasar por estudiantes a doce jóvenes policías federales, once hombres y una mujer, a fin de indagar precisamente la ubicación de Gómez Martínez. Pobladores sospecharon de esos “estudiantes” y dieron el aviso a los jerarcas templarios, que ordenaron levantarlos, los torturaron brutalmente, los ejecutaron y luego apilaron los cuerpos a media autopista, con el aviso a Luna García de que eso le pasaría a todos los policías que llegaran al pueblo.
Bueno, pues a esa escuela, el Congreso del Estado le entregó esta semana la Presea al Mérito Docente 2019. Antonio Madriz, el diputado de Morena presidente de la Comisión de Educación, y egresado de la escuela, fue el impulsor de la brillante idea. Hace tres años, Raymundo Arreola, priísta de la anterior Legislatura, impulsó que el Congreso entregara la presea Melchor Ocampo a un grupo musical de Nueva Italia que hace apología del narcotráfico, so pretexto de que es arte y cultura su producción discográfica.
Cada quien saque sus conclusiones.