La política es el paraíso de los charlatanes
Bernard Shaw (1856-1950) Dramaturgo irlandés
Más allá de posiciones jurídicas puristas y defensoras de los derechos humanos, la iniciativa del diputado priísta Marco Polo Aguirre debe ser aprobada sí o sí por el pleno legislativo.
El priísta busca que se elimine del Código Penal del Estado el término “daño”, como requisito para justificar que una víctima de un hecho criminal dentro de su vivienda o propiedad, no corra el riesgo de irse a la cárcel si de defiende y eventualmente priva de la vida al delincuente.
Es decir, hoy el Código advierte que sólo después de que haya “daño” en la víctima, ésta puede defenderse ante el criminal, lo cual resulta francamente aberrante e injusto, e incluso alienta la acción del delincuente. Caso contrario, si la víctima priva de la vida a aquel, aun en clara defensa propia, puede ir a parar a la cárcel.
Aguirre propone en cambio que la víctima de un asalto, intento de secuestro o cualquier otro ilícito en el interior de su propiedad, pueda defenderse libremente, sin que luego tenga que enfrentar la posibilidad de ir a la cárcel, al margen de las consecuencias de su acción de defensa.
A la luz de la realidad nacional y michoacana en particular, es evidente que la iniciativa del priìsta es más que justificada y es deseable que sea secundada y aprobada por el pleno de los diputados: sólo quien no conoce la realidad, que vive en burbujas de protección y en el mundo de Disneylandia, puede no estar de acuerdo en respaldar una medida como la planteada.
Si los diputados michoacanos en realidad buscan legislar en favor de las víctimas, no de los delincuentes, deben avalar la propuesta de Aguirre. Veremos.
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