Una prensa libre puede ser buena o mala, pero sin libertad, la prensa nunca será otra cosa que mala
Albert Camus (1913-1960) Escritor francés
En una época de franca dificultad para los medios de comunicación, en todos sentidos, Grupo Vox no se arredra y sigue apostando por la radio de contenido social, por la radio de profundidad, la de compromiso, no la que se queda en la superficie del entretenimiento y la diversión –que hoy de poco sirven para la obligada construcción de una sólida opinión pública.
Con esa visión, los socios de Vox decidimos entrar en el proceso de licitaciones de frecuencias radiofónicas que organizó desde el año anterior el Instituto Federal de Telecomunicaciones, en el marco de la reforma del sector, sin duda, la que mejores resultados ha generado de todas las impulsadas por el gobierno peñista.
Era, en el sentido literal, una subasta, pero con un importante acotamiento: no sólo era financiera, que ahí poco hubiéramos podido hacer los socios de Vox en comparación con casi todos los demás grupos radiofónicos que se inscribieron en el proceso. Además del componente financiero, el otro vital era el proyecto cualitativo: ¿para qué diablos queremos otra estación de radio, o más?
Cubierta una capacidad financiera básica, decidimos apostar todo al otro elemento a considerar: el cualitativo. Sin duda, la suma de ambos factores, más el segundo claramente, insidió para que Ifetel nos otorgara dos títulos de otras tantas frecuencias radiofónicas, una que cubrirá buena parte de la tierra caliente desde Tacámbaro, y la otra que lo hará con todo el valle Morelia-Quiroga, con asiento físico en el conurbado municipio de las carnitas.
Por eso, por así establecerlo como compromiso ante Ifetel y por congruencia con nuestra visión de los medios de comunicación, en Grupo Vox encaramos de reto de manejar las dos nuevas frecuencias con la misma pasión y, sobre todo, con el mismo compromiso que lo hemos hecho en Vox 103.3 y que, modestia aparte, tanta aceptación ha generado: la radio no puede ser el medio del “pan y circo” romano, debe ser instrumento de generación de opinión pública plural, abierta, profunda; la llamada radio hablada, pues. Así entendemos que deben tener como misión los medios y así seguiremos. Veremos si alcanza. Espero que sí.
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