La política necesita a gente que no necesite a la política
Paul Carvel (1964-?) Escritor belga
En un tema tan complejo como el educativo en Michoacán, nadie en su sano juicio podría pensar que las soluciones serán fáciles, ni que estarán a la vuelta de la esquina.
Este lunes, el gobernador Silvano Aureoles sostuvo una reunión con el secretario de Educación Pública del gobierno federal, Esteban Moctezuma, para abordar el conflicto educativo-magisterial de la entidad, desde dos vertientes, una de urgencia y otra de fondo.
Sólo un iluso podía suponer que el planteamiento de Aureoles, de devolver la educación michoacana a la Federación, iba a ser como coser y cantar. Es un asunto complejísimo en lo financiero, educativo, sindical, social y hasta político. A falta de cuatro días para la primer quincena de diciembre y con ella además el compromiso de pagar una parte de la prima vacacional a los trabajadores del sector en la entidad, más la incontable lista de bonos y prestaciones diversas, el agua ha llegado al cuello y de ahí la reunión emergente de Aureoles con Moctezuma.
El encuentro, ya decía, versó en dos vertientes: la urgente y la de la solución de fondo. Lo urgente es, sin duda, definir cómo y quién paga al magisterio michoacano su salario decembrino, dado que el gobierno estatal ya no representa la parte patronal y el federal aún no oficializa si acepta la devolución de Aureoles. El mandatario michoacano y Moctezuma acordaron que ese compromiso se salde con un anticipo de participaciones federales. No es lo ideal, pero es lo razonable y lo posible.
Y luego, del tema de fondo, cómo encontrar una solución estructural y de largo aliento al problema educativo michoacano, acordaron integrar una mesa de trabajo para definir conjuntamente el mecanismo más viable para ello, sin precisarse a priori en qué sentido. Tampoco pareciera lo ideal, pero es igualmente lo razonable y lo posible.
En política, como en la vida, hay que ir siempre por el mal menor, hay que ir a cualquier negociación con el convencimiento de que es preferible optar por lo posible, si lo necesario es inviable. Lo ideal y necesario para Michoacán, sería que este mismo lunes, Moctezuma hubiera aceptado recibir la educación estatal y comprometer de inmediato el pago decembrino del magisterio. Pero el tema es tan complejo, que esa solución sólo la vislumbró un ingenuo.
Por eso, no es menor que se hayan acordado las dos medidas señaladas, que ciertamente no son lo necesario, pero sí lo posible, al menos en este momento. Injusto regatear que ambos niveles de gobierno están haciendo todo lo que parece a su alcance por no soltar el tema, con todo y sus diferencias políticas. La mejor prueba es la reunión de este lunes.
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