Así se opusieron profesores jubilados de la UMSNH, tras manifestarse en Palacio Municipal, y convocar a un acto de desagravio en el Jardín Morelos
Es un agravio y una afrenta que se haya entregado la Presea Generalísimo Morelos al finado ex gobernador Agustín Arriaga Rivera. Así se sienten los nicolaitas, dijo Marco Antonio López López, hoy profesor jubilado de la Universidad Michoacana, y quien vivió esa convulsa época que cimbró a la Máxima Casa de Estudios durante el sexenio del gobierno de Agustín Arriaga Rivera, a quien le atribuyó la irrupción del Ejército en Colegio de San Nicolás, pues dijo que el propio entonces mandatario lo solicitó al entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz.
Es, incluso, atajó «una especie de provocación» pues ahora se demeritará la presea que concede Cabildo Moreliano y ya no va a ser un honor ser nominado ni recibirla, dijo en entrevista con RESPUESTA, durante la manifestación pacífica que hicieron cerca de Palacio Municipal esta mañana cerca de 60 personas, entre ellos profesores nicolaitas como él, que les tocó vivir los hechos en la época más convulsa al seno de la UMSNH, y antes de acudir ante la efigie de Don José María Morelos y Pavón para iniciar una ceremonia de desagravio ya que, expuso: «Morelos es agraviado cuando en su nombre se entrega la Presea a un asesino».
Encabezando al Movimiento en Defensa de la Jubilación de los profesores nicolaitas y ya jubilado, López López recordó haber sido detenido por los militares en 1966 cuando cursaba el segundo año de Derecho, y fijó la oposición de los presentes a esta condecoración ya que el entonces mandatario «fue un gobernador que hizo mucho daño al pueblo en términos generales, pero en forma particular a la Universidad Michoacana» justo, dijo, cuando la institución estaba posicionada como la mejor Universidad en todo el país con muchos logros y notoriedad, lo cual no era bien visto «por gentes que tienen el Poder y que tienen intereses muy fuertes», por lo cual buscaron la manera de ir minando el prestigio de la Casa de Hidalgo, relató,» a manera de acabar con ese proyecto de educación» del entonces rector Elí de Gortari.
Y es que el gobierno pretextó que la UMSNH era comunista y que estaba oponiéndose al gobierno del propio Arriaga Rivera y al de Díaz Ordaz, acusó, y señaló que hubo varios hechos en que los estudiantes fueron atacados varias veces por la Policía estatal lo cual les llevó a iniciar la huelga en la Máxima Casa de Estudios por un buen tiempo, y es por ello que, según contó el entrevistado, «eso provocó que Arriaga Rivera solicitara a Díaz Ordaz la intervención con el Ejército Nacional» al acusar a los estudiantes de conspirar y por lo cual pidió ese rescate. De ahí la irrupción de los militares en Colegio de San Nicolás donde entraron con caballo y blandiendo sables haciendo detenciones a diestra y siniestra.
Él fue uno de esos detenidos en masa que fueron a dar al cuartel de la XXI Zona Militar.