Al parecer la autoridad universitaria quiere colocar campers de expendedores de alimentos, cuyas unidades ya están estacionadas en el campus
Es necesario que permanezcan, pero que también sea seguro e higiénico el lugar. Esa es la voz que se ha dejado escuchar de entre los estudiantes que diario acuden a Ciudad Universitaria a cursar sus estudios, y que, por ende, son asistentes frecuentes al Centro Gastronómico ubicado en el campus nicolaita, mismo que Rectoría ha dispuesto desparecer tras una inspección que, curiosamente, hizo la Coepris en noviembre pasado, justo en medio de pandemia en que no había asistencia presencial.
Tras de que el jueves pasado los locatarios fuesen avisados formalmente por la autoridad universitaria a primera hora que ya no se les permitiría abrir para elaborar y vender sus alimentos, desde ese mismo día y hasta este fin de semana se colocó una mesa para recabar firmas de apoyo de comensales, a fin de que no cierren el lugar, toda vez que les pusieron también candados y soldaron las puertas para impedirles la entrada.
Los locatarios, por esta situación, piden ahora el apoyo a los estudiantes para lograr la permanencia de esta área, tras de que el problema inició desde la semana pasada con el aviso de que los comerciantes tendrían que retirarse del espacio que ocupan por presunto incumplimiento sanitario, por lo que se colocó una mesa en el acceso al Gastronómico y los alumnos estuvieron acudiendo a firmar un documento en el que apoyan la permanencia de estos negocios alimenticios, habiendo manifestado su respaldo en espera de que el lugar siga operando.
Fue desde el miércoles que se iba a demoler el Gastronómico y fueron avisados por documentos que les pegaron en las rejas. Ahora los afectados esperan dialogo con las autoridades y un acercamiento entre las partes para solucionar el problema, pues aunque hay documentos oficiales, los locatarios han dicho que harán lo posible por mantener su lugar de trabajo que hoy ven amenazado.
Este centro que congrega varios establecimientos de comida en CU, opera desde hace décadas y el convenio se renovó con la autoridad universitaria en 2019, antes de la pandemia.
Los estudiantes coincidieron en que este sitio es benéfico para ellos por estar dentro de la institución y representar un apoyo a su economía por los precios y productos que se ofrecen, pues la mayoría tiene clases desde las 7:00 horas y se van de casa sin desayunar.
Al parecer Rectoría quiere colocar en lugar de este Gastronómico campers de expendedores de alimentos, cuyas unidades ya están estacionadas varias en CU.