Al menos hasta noviembre pasado se conoció que en Tacámbaro la obra estaba detenida por falta de presupuesto
A pesar del anuncio de que ya operan en el país las 100 universidades del Bienestar, al menos en Michoacán, estado en el que se contemplan 5 de estas a ubicar en zonas de alta marginación de poco acceso a la educación superior, solo está operando bien la destinada a Zacapu que ya ha sido instalada, aunque con algunos problemas.
Poca o nula información ha venido al respecto de parte de la delegación del Bienestar en la entidad, pero de inicio del ciclo escolar en que debieron quedar instaladas, la Secretaría de Educación estatal solo tenía reportes de falta de infraestructura por lo que, a la fecha, desconoce si iniciaron o no clases. Aunque Tacámbaro reportó en Noviembre pasado que se detuvo la obra de construcción de su plantel por falta de presupuesto.
La información respecto de los avances en la edificación de los cinco planteles que supuestamente han sido destinados a Michoacán no ha fluido de manera regular por parte de las autoridades federales como lo es con el delegado para el Bienestar en Michoacán, Roberto Pantoja Arzola, así como la misma rectora del programa de universidades, Raquel Sosa Elizárraga.
Al menos hasta el mes de Noviembre pasado se había dado a conocer que en Zacapu el Ayuntamiento donó finalmente un terreno de tres hectáreas y que con recurso de 2019 en poco tiempo comenzaría la construcción del plantel, por lo que los más de 600 alumnos inscritos tendrán sede de estudio.
En el caso de Tacámbaro, tambien en el reporte de ese mes, carecía de instalaciones propias debido a que la obra se encontraba detenida por retrasos en el presupuesto, pese a que el terreno de cerca de dos hectáreas ya fue donado por uno de los ejidos de la demarcación.
En lo que hace a las tres restantes contempladas para Chilchota, Áporo y Pajacuarán ni la SEE tiene información al respecto. De hecho, se desconocen las condiciones en que operan estas universidades si es que están operando en espacios provisionales, así como su propia existencia.
Cabe señalar que en Septiembre de 2019, el entonces secretario de Educación estatal Alberto Frutis Solís, en entrevista exclusiva con RESPUESTA, había dicho desconocer si habían iniciado clases a falta de infraestructura: «no tengo datos», puesto que aunque son planteles federales deben notificar a la cabeza de sector estatal, pero al parecer cada Ayuntamiento es quien debe de arreglar el asunto de los inmuebles, y en teoría la paga también, mientras Gobierno Federal solo se encargaría de repartir becas de 2 mil 400 pesos mensuales a los que se inscribiesen para esas universidades .
El reporte era en ese entonces que «las universidades están en proceso de instalación», pues tienen dificultades de encontrar espacios donde desarrollar sus actividades, y que fueron concebidas para atender en lugares inaccesibles donde no hay oportunidad de tener estudios de educación superior en sus lugares de origen, locaciones en donde es muy difícil encontrar un inmueble para albergar a estos planteles.
Es de conocerse que cada una de estas universidades para el Bienestar «Benito Juárez» ideadas por Andrés Manuel López Obrador albergarían entre 100 y 200 jóvenes de muy escasos recursos y de esas zonas marginales, y que en el caso de que la demanda exceda la capacidad de un plantel se hará un sorteo para el ingreso. Pero aún la delegación de los Programas Federales en Michoacán no informa cuántos jóvenes se inscribieron para este primer ciclo escolar cuyo inicio se programó para el 26 de agosto pasado.
Lo único que ha reportado la delegación del Bienestar en la entidad es, escuetamente, que los edificios serán construidos este año 2020, y que por lo pronto las actividades académicas tendrán lugar en lugares prestados o que serán arrendados.
Las licenciaturas para Michoacán son acordes al lugar donde se ubique cada uno de los planteles contemplados: en Áporo se impartirá Ingeniería Agroalimentaria; en Pajacuarán, la carrera de Medicina Veterinaria y Zootecnia, en tanto en el plantel del Chilchota será Medicina Integral y Salud Comunitaria, en Zacapu: Ingeniería en Desarrollo Regional Sustentable, Derecho, Contabilidad y Administración Pública, Ingeniería Industrial, y en Tacámbaro serán estudios de Normal de Educación Básica.



