Plantea a gobierno y Congreso, se respeten los 3,630 mdp solicitados; sólo están contemplados 2,726
La Universidad Michoacana, a través de su rector Medardo Serna González, demandó del gobierno del estado y de la Cámara de Diputados, se respete el presupuesto demandado para 2018, el cual asciende a 3,630 millones, 264 mil pesos. En el proyecto de Presupuesto de Egresos, que este miércoles se aprobará en el Congreso del Estado, el Ejecutivo previó sólo 2,726 millones 310 mil pesos.
Serna hizo pública esta mañana una carta abierta al gobierno y al Congreso, a horas de que se analice y se apruebe el presupuesto de egresos para Michoacán, correspondiente a 2018.
En su postura pública, Serna no hace alusión en absoluto a ningún compromiso que se plantee la Universidad para reducir su gasto ni para impulsar reformas a su régimen de jubilaciones y pensiones que, reconocido por el propio rector, son factores que tienen sumida a la institución en su peor crisis financiera.
En el documento, el rector se circunscribe a exigir que se respete el presupuesto demandado originalmente para 2018.
Serna precisa que los poco más de 3,630 millones de pesos, serviría “para cubrir los salarios de su personal académico y administrativo en activo, así como las pensiones de sus jubilados. El recurso restante tiene que ver con el gasto operativo de la institución, que incluye la manutención de los alumnos de sus albergues estudiantiles”.
Los 2,726 millones previstos para aprobarse para 2018, dice Serna, “resultan insuficientes para cubrir las necesidades de la institución, lo que pone en riesgo la regularidad de sus funciones sustantivas a lo largo del año 2018, en detrimento de 55 mil estudiantes y casi 8 mil trabajadores y jubilados universitarios”.
Solo con un mayor presupuesto para 2018, al igual que se hizo con otras instituciones michoacanas, la Casa de Hidalgo podrá continuar cumpliendo cabalmente con la labor insigne que tiene encomendada y que sin duda alguna realiza, con calidad y compromiso social, en beneficio de la sociedad michoacana, argumenta Serna.
