Alimentos y bebidas consumidas fuera del hogar, así como bistec de res, fueron los que más contribuyeron al incremento anual del valor monetario de la canasta alimentaria
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) asumió atribuciones en materia de medición de pobreza conforme a las reformas a la Ley General de Desarrollo Social, la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y la Ley General de Contabilidad Gubernamental, que entraron en vigor el pasado 17 de julio de 2025.
En este marco, se da a conocer la actualización de las Líneas de Pobreza (LP), según ámbito rural y urbano, correspondiente a agosto de 2025. El cálculo se realiza con base en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).
Las LP ofrecen un referente monetario para determinar si los ingresos de la población son suficientes para adquirir bienes, servicios y alimentos que conforman las canastas alimentaria y no alimentaria. Este monto tiene como objetivo principal establecer un umbral monetario para la medición de la Pobreza Multidimensional (PM) en México.
Inflación general en México
La inflación general anual de agosto de 2025 fue de 3.6 %, lo que representó una disminución de 1.4 puntos porcentuales respecto a agosto de 2024 (5.0 %). Esta inflación se asemeja a la de agosto de 2019, que fue de 3.2 por ciento. Por su parte, la inflación general mensual de agosto de 2025 (0.1 %) se redujo en 0.2 puntos porcentuales respecto al mes anterior, lo que contrasta con lo observado desde enero a julio de 2025, periodo en el que no había presentado cambios (0.3 %).
Líneas de pobreza extrema por ingresos (canasta alimentaria)
En agosto de 2025, los cambios porcentuales anuales de las Líneas de Pobreza Extrema por Ingresos (LPEI), referentes a la canasta alimentaria, fueron de 2.8 % en el ámbito rural y de 4.1 % en el urbano. El cambio en el ámbito rural se ubicó por debajo de la inflación general anual (3.6 %), mientras que, en el caso del urbano, la superó. Respecto a agosto de 2024, la variación en las LPEI disminuyó 3.2 puntos porcentuales en el ámbito rural y 1.9 puntos porcentuales en el urbano (estas fueron de 5.9 y 6.0 %, respectivamente).
Los rubros de alimentos y bebidas consumidas fuera del hogar, así como el de bistec de res (de cualquier parte que se saque), fueron los que más contribuyeron al incremento anual del valor monetario de la canasta alimentaria. Ambos presentaron mayor incidencia en el ámbito rural. En este, la molida de res fue el tercer rubro que más contribuyó al aumento de la canasta alimentaria.
Líneas de pobreza por ingresos (canasta alimentaria y canasta no alimentaria)
Los cambios porcentuales anuales de las Líneas de Pobreza por Ingresos (LPI) —consideran los valores monetarios de la canasta alimentaria y la no alimentaria— fueron de 2.9 % en el ámbito rural y 3.4 % en el urbano. El incremento en ambos ámbitos fue menor a la inflación general anual (3.6 %). La variación de las LPI respecto al mismo mes del año anterior disminuyó 2.1 puntos porcentuales en el ámbito rural y 1.8 en el urbano (5.0 y 5.3 % respectivamente).
Las LPI se conforman de los alimentos (canasta alimentaria) y de bienes y servicios (canasta no alimentaria). Respecto a los productos que más contribuyeron al cambio anual de las LPI fueron los de la canasta alimentaria en los dos ámbitos; esta incidencia fue mayor en el urbano (62.0 %) que en el rural (51.7 %). Respecto a la canasta no alimentaria, destacaron los rubros de cuidados personales y de educación, cultura y recreación por ser los de mayor incidencia en el ámbito rural. En el urbano, por su parte, destacaron los de educación, cultura y recreación, así como los de cuidados personales.