Con acciones de preservación de su hábitat y la creación e implementación de instrumentos legales para su salvaguarda, el Gobierno del Estado, a través de la Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial (Semaccdet), protege la riqueza natural de Michoacán conformada por sus especies endémicas y sus hábitats, como es el caso de la palma real.
La palma real o Sabal pumus habita en la región del Balsas y es en la reserva patrimonial Volcán del Jorullo, con una extensión de 3 mil 569.50 hectáreas en los municipios de La Huacana y Ario, donde ha encontrado un refugio que permite su supervivencia.
Esta reserva patrimonial fue decretada en 2005 y es uno de los mecanismos desplegados por la administración estatal para conservar las poblaciones de palma real.
Asimismo, se tiene el programa de Ordenamiento Ecológico Regional para Infiernillo, instrumento para la regulación del uso del suelo en los municipios donde se distribuye la palma real.
La palma real se encuentra en suelos arenosos en la zona de transición entre el bosque tropical caducifolio y el bosque de encino, por lo que la deforestación y el cambio de uso del suelo fragmentan y perturban el hábitat, lo que pone en riesgo a la especie.
Por ello, las actividades de restauración ecológica y recuperación de la masa arbórea que lleva a cabo el Gobierno de Michoacán, son fundamentales para abatir la reducción de la deforestación y el cambio de uso de suelos forestales.
Otras amenazas son el uso del fuego para la preparación de tierras de cultivo, el pastoreo, el uso de herbicidas y el arado de tiro; estas afectaciones se previenen, mitigan y remedian a través de la aplicación del programa de Ordenamiento Ecológico Territorial y los planes de manejo de la zona de reserva patrimonial Volcán de Jorullo.
Llevarán rehabilitación de trojes a comunidades en la región de Uruapan
Uruapan, Mich.- Comunidades indígenas de la región de Uruapan podrán beneficiarse con la implementación del Programa de Rehabilitación de Vivienda Tradicional en la Ruta Don Vasco, para la recuperación de trojes, dio a conocer Ricardo Luna García, titular de la Secretaría de Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Territorial (Semaccdet).
En recorrido por las localidades de San Lorenzo y Corupo, pertenecientes a Uruapan, Luna García explicó que la administración estatal, encabezada por el Gobernador Silvano Aureoles Conejo, está interesada en la preservación del patrimonio cultural tangible de los pueblos originarios, así como de sus elementos de identidad, entre los que destacan las trojes o vivienda tradicional purépecha.
Por ello, convocó a los propietarios de trojes en las comunidades en la región de Uruapan interesados en la rehabilitación de estos inmuebles, a sumarse al Programa de Rehabilitación de Vivienda Tradicional en la Ruta Don Vasco, donde convergen los esfuerzos de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AMEXCID), entre otras instituciones y organizaciones, coordinados por el Gobierno de Michoacán, a través de la Semaccdet.
Recordó que en, mediante esta iniciativa, se han intervenido 81 trojes en el municipio de Charapan, las que disponen de una antigüedad que alcanza los 250 años y son testimonio vivo de la cosmovisión y la relación entre la humanidad y la naturaleza que caracteriza a la población purépecha.
Ricardo Luna agregó que el recorrido efectuado por comunidades indígenas en la región de Uruapan se han encontrado trojes susceptibles de ser intervenidas con este proyecto, que pide, entre otros requisitos, la visibilidad de las trojes, esto es, que no se tengan ocultas en inmuebles de materiales, ya que uno de los objetivos del programa es que los transeúntes y paseantes puedan admirar desde los exteriores las viviendas tradicionales.
Aunado a esto, señaló que se destinarán recursos para que, a semejanza de Charapan, se entreguen estufas ecológicas a familias en la región de Uruapan, implementos que permiten reducir el consumo de leña y la emisión de humo, con lo que se tiene un impacto favorable en la salud humana y ecosistémica.
Con este esfuerzo, se tendrá un impacto favorable en la calidad de vida de la población, en particular de las mujeres, quienes con el uso de estufas ecológicas tendrán un menor riesgo de enfermedades de las vías respiratorias por la exposición a partículas de humo y carbón.
