Sin ese elemento, no hay crecimiento, advierte el Cónsul mexicano en Shanghai
SHANGHAI, CHINA.- El crecimiento y el desarrollo de China en términos económicos tiene, a juicio del cónsul mexicano en Shanghai, Juan Alberro, una explicación y fundamento: la planeación.
“México tiene mucho que aprender en materia de planear, de organizar qué acciones deben tomarse a mediano y largo plazo, para garantizar la efectividad de los programas de desarrollo y de crecimiento en todos sentidos, porque esa ha sido sin duda la base del giro que China ha dado en cuanto a su papel en la economía mundial”, insistió el diplomático mexicano.
Alberro ha acompañado al gobernador michoacano Silvano Aureoles en la mayor parte de sus actividades en su visita oficial a esta ciudad, y en un intervalo de ellas habló con reporteros michoacanos sobre los secretos del fenómeno chino en materia de crecimiento económico y lo que ello genera para sus habitantes.
Fue insistente el diplomático mexicano en señalar el tema de la planeación como el eje central de ese “secreto”. Planear, pero también la voluntad política para garantizar que se cumpla después, precisó.
Resaltó que China, y Shanghai en particular, representan un enorme potencial de mercados para producciones mexicanas, incluyendo desde luego las michoacanas. En ese sentido, Alberro explicó que por ejemplo el aguacate y las frutas englobadas como berries, tienen gran aceptación, tanto, que la producción del primero de ellos ya no es suficiente para cumplir con los requerimientos y exigencias del consumidor chino.
En ese sentido, explicó que la balanza comercial de nuestro país con China, es profundamente favorable a los asiáticos, dado que México registra un déficit financiero de más de sesenta mil millones de dólares al año, lo que evidencia el gran potencial que hay aún para los productos mexicanos, pese a que ya muchas firmas están asentadas aquí, con fuerte presencia, como Maseca, Liverpool, Bimbo, Coopel, armadoras de automóviles, entre otras.