No se trata de una mansión desbordante de lujos, sino apenas de un comedorcito, una salita y, con suerte, una terracita, dice el diputado petista
El coordinador de la fracción parlamentaria del Partido del Trabajo (PT) en el congreso del Estado Reyes Galindo Pedraza, blindó la propiedad de su correligionario Gerardo Fernández Noroña, valuada en 12 millones de pesos y la bautizo con ternura como “la casita”.
Cuestionado sobre el súbito bienestar económico que algunos integrantes de la Cuarta Transformación presumen con recato selectivo, el diputado local evitó complicaciones y respondió que ese es un tema que deberá aclarar directamente su correligionario.
Desde su óptica, no se trataba de una mansión desbordante de lujos, sino apenas de un comedorcito, una salita y, con suerte, una terracita.
“Insisto, cuando él responda y explique esta parte, tendrá que venir la valoración pública, ver si sucede como se dice, que es una casa valuada en tanto dinero y con tantos lujos y determinadas características, no lo sé, no la conozco, más que algunas notas que ustedes los medios han compartido, porque se ve una salita, un comedorcito y una terracita, pero no sé dónde está ubicada y el valor del predio y de la construcción tendrá que decirlo públicamente, porque eso sí estamos obligados todos y no solo los de la 4T, sino todos los funcionarios y actores públicos y políticos”, manifestó Galindo.
Reconoció que desconoce el valor real de la residencia en Tepoztlán, Morelos, pero sí recordó que los militantes de la Cuarta Transformación están obligados a vivir en la llamada “justa medianía” y bajo la austeridad republicana.
Según él, más que un ideal político, debería asumirse como un principio democrático universal, válido para cualquier actor público.
La polémica surgió tras revelarse en medios nacionales que Fernández Noroña, senador que llegó a la curul por el PT, pasó de vivir en una vecindad en su juventud a adquirir una residencia de 12 millones de pesos, contradiciendo el discurso contra los privilegios.
Cabe recordar que Noroña se afilió a Morena el 18 de febrero y desde entonces ha hecho de la frase “por el bien de todos, primero los pobres” su carta de presentación.
Sin embargo, su estilo de vida parece desentonar con el pregón constante de austeridad republicana, la misma que recita con fervor en cada discurso mientras recuerda con nostalgia su origen en una humilde vecindad capitalina.
