Llegamos sin compromisos inconfesables y no para servir a grupos fácticos, sino a los michoacanos, dice en su mensaje
“Llegamos sin compromisos inconfesables y no para servir a grupos fácticos, sino a los michoacanos”, con esa frase, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla abrió su cuarto informe de gobierno ante la 76 Legislatura, donde delineó avances en infraestructura, seguridad y reformas legales.
El mandatario presumió que en cuatro años su administración ha invertido más de 40 mil millones de pesos en infraestructura.
Destacó la ampliación de la autopista Siglo XXI a cuatro carriles, con 7 mil 700 millones de pesos, y la modernización de la autopista Maravatío–Zitácuaro, con 4 mil 812 millones, para conectar municipios con el Estado de México y la Ciudad de México, facilitando el comercio agrícola y el turismo.
En seguridad, reconoció el desafío permanente, pero resaltó una reducción del 60 por ciento en homicidios dolosos.
Aseguró que Michoacán es referente nacional en combate a la extorsión y cuenta con 50 cuarteles, 39 de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano, además de los de la Guardia Civil, y adelantó la edificación de un nuevo cuartel en la Meseta Purépecha, en San Felipe de los Herreros.
Ramírez Bedolla recordó que el primer año de su mandato se destinó a sacar al Estado de la crisis financiera, inseguridad e ingobernabilidad, el segundo a ordenar las finanzas y devolver la esperanza y posteriormente a planear la mayor inversión social en la historia local.
A nivel social y legislativo, destacó la tipificación de la deuda alimentaria como delito, la aprobación del aborto legal y seguro, y la reforma al Poder Judicial para garantizar jueces confiables.
“Estamos construyendo un estado de bienestar que pone al centro la dignidad humana y reconcilia a los gobiernos con su pueblo”, afirmó.
Finalmente, convocó a su gabinete a consolidar estos cambios en los dos años que restan.
“No llegamos a administrar inercias, llegamos para gobernar con ética y para todos los michoacanos”, manifestó.