El ex gobernador no descarta salir del PRI si persiste el acoso de que será injustamente expulsado
Para el ex gobernador Fausto Vallejo Figueroa es una «canallada» la imposición de su correligionario Salvador Galván Infante como dirigente para el PRI de Morelia, de quien dijo es un buen cuadro y no tener nada personal en su contra, pero cuestionó la imposición bajo la que asumirá el cargo.
«Si hay una pizca de dignidad en la militancia del partido no se debe de permitir esta situación», atajó, que fue «o por encargo o por mandado» y con desacato de lo legal, pero si bien repuso respetar a Galván Infante, acusó que está siendo parte del juego sucio.
En rueda de prensa este mediodía acompañado de priistas que le apoyan como Samuel Montejano y Ema Mondragón, informó a pregunta expresa que decidirán en conjunto si se mantendrán apoyando al Partido Revolucionario Institucional, pero a pregunta expresa no descartó Vallejo Figueroa poder determinar salir del partido si éste injustamente lo sigue acosando con que lo expulsarán por no haber apoyado en 2015 a Ascensión Orihuela que buscaba ser gobernante del estado.
Refirió que en el escenario de la que es la sociedad más politizada de Morelia «ya no son tiempos de soportar este tipo de circunstancias», y menos con lo cuestionado que está el PRI en que las bases vienen exigiendo la renovación de dirigentes por consulta a la base.
Vallejo Figueroa y sus simpatizantes, que no son una corriente en torno suyo, aclaró, podrían llegar a desconocer al próximo nuevo líder local y advirtió que si esto hace la cúpula priista a nivel de un Comité Municipal, lo harán igual con las candidaturas a diputaciones, ediles, gubernatura, etcétera.
