El gremio está integrado por 149 empleados nicolaitas opositores al SUEUM, hay una lista de 70 más listos a adherirse
La Junta Local de Conciliación y Arbitraje concedió el registro y toma de nota al Sindicato de Trabajadores de la Universidad Michoacana (STUMICH), lidereado por Armando Rangel Díaz, hace unos minutos. El gremio está integrado por 149 empleados nicolaitas opositores al SUEUM, agrupación de Eduarto Tena Flores, pero hay una lista de 70 más listos a adherirse, y que han desertado de las filas moradas.
De afiliarse este número de socios tendrían 220 miembros de inicio, con todos los derechos y conquistas laborales intactos.
Los ciclos se cumplen, dijo Rangel Díaz quien recibió la toma de nota y el documento que registra al STUMICH de parte del presidente de la JLCyA, a donde acudió acompañado del abogado del nuevo gremio, Juan Mosqueda.
Dijo que La invitación está abierta para quienes quieran cambiarse a este nuevo sindicato que fué conformado el pasado 5 de Abril 2017 con una lista de 187 integrantes entonces, y bajo las siglas de SUTUM, hoy Stumich que es el tercer sindicato en la Casa de Hidalgo, al que están integrados también los otros lideres opositores al grupo morado de Tena Flores, Aurelio Alipio Ceja, Oliverio Esquivel y el propio abogado Juan Mosqueda, directivos del ya inexistente Frente por los Derechos de los Trabajadores Universitarios.
De acuerdo a Rangel Díaz optaron por fundar una nueva agrupación sindical porque ya era intolerable «el clima de terror y de intolerancia» que ha impuesto Tena Flores en contra de los empleados universitarios, ya que tiene secuestrado al SUEUM.
La idea de la creación del nuevo sindicato universitario surge tras que los tenistas expulsaron ilegalmente a por lo menos 200 miembros del Sindicato Unico de Empleados de la Universidad Michoacana, incluyendo a los tres señalados lideres opositores y al abogado. Pero aclaró que el objetivo de crear este nuevo sindicato es defender los derechos de los trabajadores, no lesionar ni lastimar a los sindicalizados «como lo hacen cotidianamente Lalo Tena y sus secuaces».
