Durante su charla en MenteMorfosis, de Movimiento Ciudadano, observó que a México le falta que los convencidos de cambiarlo «le entren», es decir, le entren todos los jóvenes porque no hay jóvenes en política
Muy pronto Movimiento Ciudadano va a gobernar este país. El jóven senador naranja, Samuel Alejandro García Sepúlveda, hablo ante jóvenes de su partido en Michoacán a media mañana de este Sábado, donde cuestionó, de entrada, a quienes se dicen interesados en servir al pueblo y por ello querer ocupar un cargo público o político, pero que no son capaces de mantener unido su entorno familiar: «en política como en todo, hay un núcleo», dijo, y el principal es el familiar.
El originario de Monterrey y con 31 años de edad, definió durante su participación en MenteMorfosis que se empieza desde dentro hacia afuera: la cuadra, la colonia, la ciudad, el distrito electoral, el municipio, pero «si no tienes la bases sólidas, los siguientes edificios y pisos vienen endebles», comparó. Y por ello aconsejó a los asistentes reunidos en un hotel de esta capital que si quieren arreglar un pais o un estado, primero asegúrense de arreglar su yo interno y su familia.
Dijo que en casa de los regios se les enseña a salir adelante «en una tierra muy complicada, y no enseñan el mérito del trabajo», y más que el trabajo están la superación y el estudio. Y también relató su ingreso a la política por un «error administrativo», cuando él quería seguir ejerciendo su carrera de abogado fiscal y administrativo, y al pretender estudiar su doctorado en Derecho en su aula mater, el Tec de Monterrey, como no se llenó el aforo de alumnos, su director le inscribió junto a sus otros tres compañero «sin decir agua va» al doctorado en Política Pública.
«Me cambiaron de doctorado, yo creo que me voy a salir», recuerda haberle dicho a su papá entonces, ya que «en la familia no tenemos ningún político, ningún grillo», pero al seguir el consejo de su mayor «me encantó y me quedé todo el doctorado».
García Sepúlveda, quien ya fué diputado local en su natal Nuevo León antes de ganar el escaño a la Cámara Alta en 2018, habló de cómo desde los jóvenes es posible llevarle la contra a la corrupción y lograr políticas del lado de los ciudadanos.
El lema de este evento, MenteMorfósis es «los jóvenes estamos para tomar las riendas de nuestro presente, para lograrlo necesitamos hacer #MenteMorfósis y ampliar nuestras ideas para sacar lo mejor de nosotros» y tiene lugar este fin de semana, 12 y 13 de Octubre, en lo que han definido sus organizadores como un encuentro de ideas nuevas.
En su larga y amena charla, ya entrado en política, advirtió que si Morena controla la Suprema Corte de Justicia de la Nación «nos puede mandar el país al carajo», así como alertó de la falta de interés de la población en general en acudir a votar, en hablar de política, y el desconocimiento de figuras importantes como la revocación de mandato, por lo que urgió a que el reto «que tenemos es politizar al país», pero para politizar a la población es necesario que los naranjas ocupen espacios públicos.
Ello porque «esos huecos si no los llenamos, los llena el PRI o los llena Morena…tenemos qué llenarlos nosotros que confiamos en el empoderamiento desde lo local y que confiamos en la individualización de la política», llamó.
A México le falta que los convencidos de cambiarlo «le entren», es decir, le entren todos los jóvenes porque no hay jóvenes en política.
