En entrevista, el perredista Carlos Navarrete dijo respetar la decisión de Aureoles de apoyar al priista Meade, pero el candidato de los perredistas y del Frente es Anaya, fue claro
Una cosa es el gobierno que le responde a la población y otra el partido político que le responde a su militancia: el gobernador Silvano Aureoles con su apoyo público a Meade puede trazar una ruta diferente a la el PRD que está, a su vez, trazando la suya propia para llevar a Ricardo Anaya al triunfo en esta elección 2018 dentro del Frente tripartita consolidado con PAN y MC, dijo el perredista Carlos Navarrete Ruiz, en entrevista este Sábado en Morelia, a donde acudió a encabezar los festejos del 29 Aniversario del Partido de la Revolución Democrática.
Repuso que esta declaración del mandatario michoacano es a título personal, por lo cual rechazó que vaya a afectar el posicionamiento que lleva el candidato frentista, ubicado «pisándole los talones» a Andrés Manuel López Obrador.
Refirió que el aurinegro está en Por México al Frente con los partidos Naranja y Acción Nacional cuyo abanderado es el citado albiazul, en tanto los candidatos perredistas están haciendo una campaña que van a intensificar «y nosotros respetaremos la decisión del gobernador», dijo, como gobernador de todos los michoacanos de panistas, de priistas, de perredistas, de morenistas «de todos». Es decir, fue obvio: Silvano Aureoles trae su ruta como gobernante, y su partido la propia trazada.
Navarrete Ruiz señaló también que ya no son tiempos en que México pueda ser gobernado por un solo hombre ni por un solo partido ya que el país superó esos tiempos de cacicazgo que López Obrador quiere revivir e imponer, y lo cual consideró peligroso: «`pensar así es regresarnos a los tiempos de Echeverría o de López Portillo que México ya superó».
A ello agregó que el PRD ha luchado 29 años para que no existan partidos de Estado vinculados a su gobierno del cual dependan totalmente.
No dudó que su partido pague un costo electoral por integrar esta coalición partidista, pero también estimó que es probable que electores que nunca han votado por el PRD lo hagan ahora.



