Brilló por su ausencia en la sesión del Congreso de este jueves y solicitó bajar el punto de la orden del día que presentaría relacionado con la paulatina habilitación y reapertura de gimnasios de la entidad
Luego del tremendo resbalón, de la legisladora morenista, Mayela Sala Sáenz, en la sesión de este miércoles, al llamar “pinche bola de nacos” a sus compañeros de bancada, este jueves brilló por su ausencia y solicitó que se bajará el punto de la orden del día que presentaría relacionado con la paulatina habilitación y reapertura de los gimnasios de la entidad.
Fue en la sesión ordinaria que se realizó este jueves, que la legisladora obradorista, había presentado una propuesta de acuerdo de urgente y obvia resolución para exhortar al titular del poder Ejecutivo en el Estado, para que, en la medida de lo posible, tomando en cuenta las medidas sanitarias y protocolos que han presentado asociaciones deportivas, se abriera paulatinamente los gimnasios, centros y unidades deportivas.
La legisladora obradorista, había basado sus fundamentos, en evitar problemas que ocasiona el confinamiento, tales como el sobrepeso, depresión, ansiedad, atrofia muscular y estrés.
Sin embargo, tras el ridículo público que realizó este miércoles al olvidar apagar sus micrófonos en la sesión virtual e insultar a sus compañeros, llamándolos “pinche bola de nacos”, por no recibir el apoyo a una de sus propuestas presentadas, Salas Sáenz inmediatamente se retiró de la sesión de ayer y no reapareció en la programada para este jueves.
La legisladora morenista, no es la única que ha sido víctima de las plataformas virtuales, tan sólo en la presente sesión, se escucharon los ronquidos de un legislador, hecho que provocó que la diputada petista Teresa Mora Covarrubias, demandará que despertarán al compañero que se había quedado dormido.
También la legisladora Teresa López Hernández solicitó en una sesión pasada, que le llevarán unos “tacos de carnitas” porque no había desayunado, mientras que Francisco Cedillo de Jesús fue evidenciado en la cámara de su computadora, acostado atendiendo la sesión, mientras que otros con menos recato incluso vitorearon que se encontraban haciendo deporte, como el panista, David Cortés Mendoza.
