LA SEÑORA PRESIDENTA
Vaya decepción del gobierno de la primera mujer presidente de México Claudia Sheinbaum, sus últimas decisiones en diferentes rubros, dejan mucho que desear y ratifica que su administración está dispuesta a todo para consolidar la dictadura de Morena, desde proteger a funcionarios mentirosos y corruptos de la 4T, hasta el intentar apoderarse de los ahorros de los trabajadores.
Las últimas tres pifias de su gobierno, son ejemplos totalmente contrarios a lo que pregona; honestidad y credibilidad están comprometidas en asuntos que revelan el verdadero carácter de la señora presidenta.
El asunto sobre la boda del cercano colaborador de Alicia Bárcena; el pleito entre los legisladores morenistas entre el Senador Adán Augusto López y el líder de los Diputados Ricardo Monreal, quienes se acusaron mutuamente del mal manejo de al menos 120 millones de peso; y el tema del INFONAVIT, donde el gobierno pretende utilizar los ahorros de los trabajadores, solo demuestran que la dictadura de partido que vive México, se está institucionalizando.
En el caso que inmiscuye a Alicia Bárcena, y tras el escándalo nacional sobre el abuso de poder del ex jefe de oficina de la Secretaria de Relaciones Exteriores, Martín Alonso Borrego, mano derecha de la funcionaria, que usó el Museo Nacional de Arte (MUNAL) para casarse con un diplomático rumano, tuvo que renunciar.
Alicia Bárcenas declaró que ella NO estuvo enterada y que no autorizó esa solicitud del salón para Relaciones Exteriores; sin embargo, aparecen imágenes de ella y su familia en la fiesta, por lo que también debería renunciar por mentir descaradamente.
Sobre este asunto, de un claro abuso del poder público y tráfico de influencias, la presidenta defendió a la funcionaria, resaltando su trayectoria y ratificando que seguirá como secretaria de Medio Ambiente.
El otro escándalo propiciado por los morenistas, donde hubo acusaciones y demandas judiciales por parte del senador Adán Augusto López, quien acusó a su compañero de partido Ricardo Monreal, de incurrir en mal manejo de recursos por al menos 120 millones de pesos durante el periodo en que encabezó el Senado; Monreal pidió que se presentaran pruebas, comenzando una escaramuza de declaraciones y acusaciones hasta que la presidenta Sheinbaum tuvo que intervenir.
Nuevamente la mandataria defendió a sus funcionarios; aclaró que se reunión con ambos morenistas, donde dialogaron acerca de la importancia que tiene su proyecto político. No obstante, Sheinbaum minimizó las acusaciones y el conflicto surgido entre los dos políticos. Eso sí, del dinerito, nada se dijo.
Y la última decepción presidencial, se refiere a la reforma que pretenden hacer al INFONAVIT, que busca fondear el proyecto de vivienda de bajo costo con los ahorros de la subcuenta de vivienda de los trabajadores, donde hay 2.2 billones de pesos.
Después de consultas con empresarios y sindicatos, que mostraron su inconformidad por la reforma, Morena en la Cámara de Diputados frenó la aprobación de las modificaciones a la Ley del Infonavit y a la Ley Federal del Trabajo, que buscan regular la construcción de vivienda de bajo costo. Por supuesto, la bomba explotó.
Los excesos del poder, del poder absoluto, deben tener un límite, pero mientras no los haya en México, el poder dictatorial lo comienza a ejercer a plenitud, la señora presidenta.