La aportación de los migrantes michoacanos a la economía local nunca ha sido reconocida ni por el gobierno federal o el estatal, mucho menos por los ayuntamientos; al menos no al mismo nivel de importancia que lo que representa el monto de recursos que envían a su tierra natal y que es prácticamente el mismo o incluso mayor que el presupuesto que ejerce toda la administración pública del estado en un año.
De acuerdo al secretario estatal de los Migrantes, José Luis Gutiérrez Pérez, al cierre del 2019 los connacionales habrán enviado a su seres queridos radicados en el estado algo así como 3 mil 500 millones de dólares, que representarán un aumento de casi 10 puntos porcentuales en relación al año anterior. Esto significa que a prácticamente 9 de cada 10 hogares michoacanos ingresarán 67 mil 550 millones de pesos, que se gastarán en tres rubros principalmente: alimentación, salud y educación.
Lamentablemente, los apoyos gubernamentales de por sí prácticamente nulos, fueron todavía más a la baja con la llegada de Andrés Manuel López Obrador, que no ha sido congruente con su discurso y en el presupuesto del 2019 eliminó el Fondo de Apoyo a Migrantes, del que le correspondían a Michoacán 21 millones de pesos y disminuyó a sólo 200 millones la aportación federal al programa “3 x 1” para todo el país, de tal manera que a Michoacán sólo le corresponderían cerca de 9 millones de pesos.
En el ámbito estatal, los migrantes tampoco han sido correspondidos presupuestalmente hablando, ya que también su aportación ha ido a la baja. En 2018 se consideraron 76 millones de pesos y para este año serán sólo poco más de 60 millones. Incluso la falta de recursos federales, obligará a que no se cumpla el compromiso del gobernador Silvano Aureoles Conejo, de crear nuevas Casas Michoacán en el vecino país del norte.
Pero nada desanima a los migrantes, ni la política agresiva del presidente Donald Trump ni la poca importancia que les representan a los gobiernos en turno, porque el trabajo de los casi dos millones de michoacanos que radican en los Estados Unidos de Norteamérica no tiene intereses políticos ni partidistas, tiene un objetivo muy concreto: ayudar a mejorar la condición de vida de sus familias.
Las vacaciones legislativas.
A partir de este lunes, diputados locales también aprovecharán el periodo de asueto y no sesionarán en el pleno durante las próximas dos semanas, pese a que tienen temas importantes pendientes, como la derogación de los impuestos ecológicos que aprobaron las comisiones de Hacienda y Presupuesto desde hace tres semanas; y el análisis de la cuenta pública del gobierno estatal correspondiente al 2017, que debe presentarse ante la plenaria a más tardar el 30 de abril.
Y como ya ocurrió con las cuentas públicas municipales del mismo año, los legisladores realizarán el análisis de la estatal en tan sólo una jornada de trabajo, prevista para el 22 ó 23 de este mes, en la que la comisión de Presupuesto contempla integrar el dictamen, a partir del análisis que realizaron integrantes de la comisión Inspectora el pasado jueves.
Sin embargo, sabemos que hay resistencia de algunos diputados a interrumpir sus vacaciones para realizar ese trabajo y podría ser que la comisión sesione hasta el 29, en el límite previsto por la ley.
Entonces, ni qué decir, no podemos esperar mucha calidad del trabajo que realizarán los legisladores, como tampoco fue meticulosa la labor de la Auditoría Superior de Fiscalización, que con todo, decretó observaciones por más de seis mil millones de pesos, en proceso de comprobación.
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