Le califican de “señora voluntariosa, intolerante y soberbia”, y es un peligro que “meta mano en la Ley Orgánica”
El SUEUM ha cuestionado el proceder de la rectora Yarabí Ávila González respecto a su prisa por aprobar el Reglamento de la Universidad Michoacana, en lo oscurito en el Consejo Universitario donde la mayoría son a su modo, y el debate y defensa solo lo dieron los miembros del cuerpo colegiado pensantes que se oponen siempre a las arbitrariedades de la funcionaria.
En un manifiesto, el líder del Sindicato Único de Empleados de la UMSNH, Eduardo Tena Flores, exhibe y cuestiona que “las disposiciones reglamentarias aprobadas por la Rectoría en contubernio con el Consejo Universitario, no son otra cosa más que la evidente instauración de virreinato que pretende presidir la señora Yarabí Ávila, quien ante la falta de resultados tangibles para la comunidad universitaria, pretende asumir un poder absolutista que elimine cualquier tipo de negativa que impida la aprobación de las más exóticas ocurrencias y caprichos de la mandataria nicolaita”.
La reforma del Estatuto Universitario solamente es el inicio de una serie de cambios, que en las manos correctas serían necesarios, argumenta, “pero estamos ante la presencia de una señora voluntariosa, intolerante y soberbia, acostumbrada a ejercer su poderío frente a los demás y es ahí donde radica el verdadero peligro de permitir que la actual rectoría meta las manos en la Ley Orgánica”, ataja el líder sueumista, para advertir que “es bien cierto que la 4T no se ha sentido en Michoacán, debido a personajes con ideologías más cercanas al conservadurismo que al progresismo obradorista”.
Cualquier modificación a la Ley Orgánica depende del H. Congreso del Estado, sin embargo, las formalidades no escritas dicen que una reforma tendría que venir de los universitarios y la consolidación de un proyecto de semejante envergadura “sería la cereza en el pastel de un rectorado que a casi año y medio de su arribo, solo ha conseguido engrosar el álbum de fotografías de la rectora y los alumnos que transitan por los pasillos de Ciudad Universitaria”, critica duramente a quien encabeza Rectoría.
Tena Flores admite que “los universitarios estamos convencidos de la necesidad de trabajar en una reforma a la Ley Orgánica, pero esta deberá ser integral y sobre todo progresiva y no dotada de un carácter involutiva, que es lo que busca la señora Yarabí y que anticipó de manera muy obvia en la reciente aprobación al vapor del Estatuto, donde el único criterio que imperó fue el de satisfacer la voluntad de una rectora que jamás acepta una negativa como respuesta a sus caprichos”.
